penacho
Algunas aves exhiben en la parte superior de la cabeza un vistoso conjunto de plumas, que en español se conoce como penacho. Por extensión, se ha dado este nombre también a las plumas que sobresalen del tocado de las mujeres o de los caballos engalanados para solemnidades.
Entre los antiguos, el penacho era el ornamento del casco de la caballería y la infantería y servía para distinguir por sus colores las legiones, centurias, decurias, etc.
La palabra llegó al español a mediados del siglo XVI, procedente del italiano pennacchio, proveniente, a su vez, del latín penna ‘pluma’. En sentido figurado, se usa también para referirse a la vanidad, presunción o soberbia de algunas personas.