raíz
En virtud del contacto tan estrecho que la agricultura establecía generaba entre los pueblos más antiguos, raíz y rama originaron una amplia familia de derivadas, con muchos significados en sentido figurado.
Los pueblos prehistóricos indoeuropeos usaban la raíz wrad- para formar palabras que hacían referencia a los matorrales y a sus ramas y raíces. Ese vocablo prehistórico dio lugar a las voces latinas ramus y radix, a partir de las cuales se formaron las castellanas rama y raíz.
Así, raíz adquirió el sentido adicional de ‘causa, origen’ y decimos frases como la pobreza de los hablantes está en la raíz de los problemas del idioma. Y se han formado voces como arraigado, desarraigado, enraizado, radical, radicado, entre muchas otras.
Ramus siguió un camino parecido, y rama dio lugar a enramada, ramalazo, ramificación y ramera, también entre muchas otras.
Existen otras palabras rama, de diferente origen. Una de ellas es empleada para designar el ‘cerco de hierro cuadrangular con que se ciñe el molde que se ha de imprimir, apretándolo con varias cuñas o tornillos’ (Dle) y proviene del alemán Rahmen, del mismo significado.
Asimismo existe la locución adverbial en rama, que se aplica a los productos que todavía no han sido sometidos a su último proceso industrial y también al libro que ha salido de la imprenta, pero que aún no ha sido encuadernado.
La palabra ramera, sinónimo de prostituta, también se origina en rama, como veremos próximamente en otra entrega.