metáfora
Figura retórica que consiste en el traslado del sentido recto de una palabra o de una expresión, a otro figurado. No es una comparación; si se dice tus ojos son como dos luceros, no se establece una metáfora sino una comparación, intermediada por el relativo como. En la metáfora, en cambio, se verifica un traslado completo del significado de la o las palabras, como cuando Quevedo describe una sonrisa de mujer como un “relámpago de nieve entre rubíes”.
El vocablo proviene de la Retórica y la Poética de Aristóteles, que definía con la voz μεταφορά (metaforá) ‘traslado’, un ‘desplazamiento’, retomado por los poetas latinos como methăphŏra. “Es la transferencia de un nombre de una cosa, a otra cosa”, decía Aristóteles.
En literatura, la metáfora es clasificada como un tropo, por identificar, con una finalidad estética, dos realidades diferentes con base en alguna semejanza.
Don Quijote describe a su amada Dulcinea mediante una sucesión de metáforas:
...sus cabellos son oro, su frente campos elíseos, sus cejas arcos del cielo, sus ojos soles, sus mejillas rosas, sus labios corales, perlas sus dientes, alabastro su cuello, mármol su pecho, marfil sus manos, su blancura nieve...