LA PALABRA DEL DÍA

Por Ricardo Soca

ETIMOLOGÍA - ORIGEN DE LAS PALABRAS
Jueves, 21 de noviembre de 2024

consola

LA PALABRA DEL DÍA

Consola del coche Fiat Uno Way 2020

consola

Mesa sin cajones, diseñada para quedar adosada a la pared, que posee un tablero que va hasta el piso. Actualmente se usa más bien para designar un dispositivo de una máquina, generalmente de mesa, que contiene los comandos para su operación.

Modernamente, este vocablo es mucho más empleado para designar un dispositivo de hardware, o a veces de software, dedicado introducir datos en una computadora, en un aparato de videojuegos o en un equipo de sonido. También se llama consola a los propios aparatos de videojuegos: El año que viene, concretamente en octubre de 2001, Microsoft lanzará al mercado una consola de videojuegos (CREA, 2000).

En los automóviles, se suele llamar consola al panel de instrumentos que está al frente del conductor, que contiene los instrumentos de medición de velocidad, combustible, radio, acondicionador de aire y manejo de los vidrios laterales, etc.).

La palabra nos llegó desde el francés console, lengua en la cual designaba una ménsula fija a una pared, a veces usada para sostener una estatua. Corominas (1980) precisa que el vocablo francés se derivaba de console ‘consuelo’ y este del verbo consoler ‘consolar’ que, en el lenguaje monástico de la Edad Media se usaba con el sentido de ‘sostener materialmente algo’. La palabra pasó con el mismo significado al inglés y al portugués console, y al alemán Konsole.

EL MEDIEVALISMO DEL DÍA

Grasa de cerdo para uso culinario

saín

Del latín vulgar sagīnum ‘grasa’ y este del latín clásico sagīna,  āe.

f. Grasa.

Et toma la saín blanca et buélvela con el bálssamo et póngelo en ssu natura. Libro de los azores (c 1300). Corde.  

PÍLDORAS DE LENGUAJE

Quisiera saber si es válido que dos infinitivos vayan juntos; tal es el caso de la siguiente oración que escucho con frecuencia: «Tenemos que esperar llegar a la oficina para…». Aunque me suena correcta, desde mi punto de vista, esa oración podría ser: «Tenemos que esperar que lleguemos a la oficina para…».

Esperar en el ejemplo de su consulta está empleado con la acepción de ‘dar tiempo a que algo suceda antes de hacer otra cosa’, caso en el que es intransitivo y se construye con un complemento introducido por a.

El complemento es una oración subordinada encabezada por un infinitivo si el sujeto de ambas oraciones es el mismo; o encabezada por la conjunción subordinante que si los sujetos son distintos. Su ejemplo estaría entonces bien formulado así:

Tenemos que esperar a llegar a la oficina para...:‘nosotros’ es el sujeto de tener que esperar y de llegar.

Tenemos que esperar a que los demás lleguen a la oficina para...:‘nosotros’ es el sujeto de tener que esperar y ‘los demás’,  el de llegar.

Lo anterior no significa que en el primer caso no se pueda sustituir el infinitivo por que y el verbo conjugado (Tenemos que esperar a que lleguemos...) , pero no es lo más usual.

EL LATÍN DEL DÍA

modum nescit ponere voluptas.

El placer no sabe imponerse moderación.

Fecha de envío: 
Jueves, 25 de abril de 2024