LA PALABRA DEL DÍA

Por Ricardo Soca

ETIMOLOGÍA - ORIGEN DE LAS PALABRAS
Jueves, 21 de noviembre de 2024

brújula

LA PALABRA DEL DÍA

brújula

Fue una de las grandes invenciones cuya llegada a Europa al final de la Edad Media hizo posible el descubrimiento del Nuevo Mundo, así como otras hazañas de los grandes navegantes que salieron en busca de los límites del planeta a partir del siglo XV.

La brújula, un instrumento consistente en una aguja imantada que señala siempre el norte magnético, ―que está situado a unos 1.600 km del Polo Norte geográfico, lo que representa una distancia angular de cuatro grados― había sido inventada por los chinos hacia el siglo X de nuestra era y llevada al Viejo Continente por navegantes italianos, presumiblemente venecianos. El nombre chino del aparato se ha perdido, pues el sorprendente instrumento fue llamado bùssola al llegar a Italia hacia el siglo xiii, palabra tomada del latín vulgar buxida ‘cajita hecha de madera de boj’, procedente a su vez del griego pyxis, -idos, del mismo significado. En España, la palabra italiana se deformó por influjo del castellano antiguo buxeta ‘cajita’ y tomó una r después de la b inicial.

La Academia registra también el verbo brujulear, cuyo significado principal es ‘descubrir por indicios y conjeturas algún suceso o negocio que se está tratando’.

EL MEDIEVALISMO DEL DÍA

deytado

Del latín dictatum.

m. Texto hablado o escrito, discurso.

Antes me plaze et he grant sabor de ver vestras prosas é vestro deytado. Canc. Baena, p. 93. 

PÍLDORAS DE LENGUAJE

Quisiera saber como se conjuga el verbo (de sabor) en 1ª persona de indicativo.

La conjugación del verbo saber en cualquiera de sus significados es una sola: sé, sabes, sabe, sabemos, sabéis, saben (presente), etc. Lo que cambia es el esquema sintáctico de uso: 1. «saber alguien algo», cuando indica conocimiento: yo sé lo que pasó en la reunión, (sujeto: yo, «lo que pasó ayer en la reunión», complemento directo) 2. «saberle algo bien/mal a alguien», en el sentido de gustar algo, en especial la comida: la persona afectada por el hecho de gustarle la comida ya no es el sujeto sino el complemento indirecto de la oración y la cosa gustada ‘sabida’ es el sujeto: el pescado me sabe bien. (‘yo’ persona afectada, mas no sujeto gramatical, reflejada en el oración por el pronombre de complemento indirecto ‘me’; ‘sabe’ concuerda con el sujeto ‘el pescado’, tercera persona del singular). Utilizar la forma de primera persona del singular ‘sé’ en el sentido de sabor, produce frases insólitas como: yo me sé muy bien (a mí) ('yo' sujeto gramatical; 'me' pronombre de c.i.). Equivale a decir «tengo buen sabor». En resumen, la forma verbal es la misma: yo sé la lección; yo me sé muy bien (a mí).

EL LATÍN DEL DÍA

seniorem ne increpaveris, sed obsecra ut patrem.

Al anciano no lo reprendas con dureza, más bien exhórtalo como a un padre.

Fecha de envío: 
Martes, 14 de mayo de 2024