sombra
Imagen oscura que proyecta un cuerpo opaco sobre una superficie al interceptar los rayos de luz: la sombra de los edificios cubre la arena de la playa desde las cuatro de la tarde. Es también el nombre de un espacio adonde no llega la luz: Me resguardé a la sombra porque el sol estaba demasiado fuerte.
La palabra, oriunda del latín ŭmbra, se empleó en nuestra lengua por lo menos desde el siglo XIII, cuando aparece en el poema de Berceo Santa Oria (v. 144a): Vido por esa sonbra muchas gentes venir, todas venién gradosas Oria a rescebir.
Corominas (1980) hipotetiza que la s-, añadida solo en castellano y en portugués, puede deberse a la influencia de sol, en contrastes como solear y sombrear. El etimólogo catalán menciona en apoyo de hipótesis la palabra solombra ‘sombra’, que aparece varias veces en el Libro de Alexandre, y que ha sido usada en Maragatería y en Asturias.
Sin embargo, parece más fuerte la propuesta del romanista alemán Friedrich Diez, quien postula un latín sŭbŭmbrare, que realmente existió en el latín posclásico.
Cabe anotar que el étimo latino dejó, no obstante, su huella en el ya arcaico umbra ‘sombra’ y en umbrío, a ‘lugar donde da poco el sol’, usado por Benito Pérez Galdós, en su novela O’Donnell (1904):
"¿Qué tienes, hijo? ¿Ocurre alguna novedad?", le dijo destacándose del umbrío follaje para llegarse a él y ponerle sus manos en los hombros.