Destacan importancia del Diccionario de mexicanismos
La Crónica de HoyEl primer Diccionario de mexicanismos está conformado por 12.000 entradas y 18. 500 palabras a las que en México se les da un significado diferente o adicional al estándar.La coordinadora del texto, Concepción Company, aseguró que «los protagonistas del diccionario son los hablantes mexicanos», al tiempo que destacó que nunca en la historia del español de México se había realizado una tarea semejante a nivel colectivo e institucional.La también presidenta de la Comisión de Lexicografía de la Academia Mexicana de la Lengua añadió que las fuentes que se recogieron para este trabajo provienen tanto de la lengua oral, como la escrita, entre registros cultos y populares, además la investigación se abrió a campos como el cine o el cómic.De esta manera, voces como «migración», «platicar», «chapopote», «chido», «ruco» y otras acepciones que no se emplean en el español de España, ni en otros países latinoamericanos, son los elementos estelares de este diccionario publicado por Editorial Planeta, señaló Company.Con esto -recalcó la académica- se pretende manifestar nuestra «identidad lingüística» y usarlo como «instrumento de educación, reflexión y tolerancia frente a la otredad. Es una herramienta para el mejor conocimiento de nosotros mismos».Company aseguró que no se incluyó la jerga del narcotráfico porque todavía no es usada por la mayoría de los mexicanos y porque el diccionario no contempló regionalismos.El Diccionario de mexicanismos fue dado a conocer en el marco de la 24.a Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara por la propia Company, quien estuvo acompañadas por los académicos José G. Moreno de Alba, Humberto López Morales, José Antonio Pascual y Gonzalo Celorio.En esa reunión, también se presentó el Diccionario de americanismos, elaborado por las veintidós Academias de la Lengua española.Humberto López Morales, secretario general de la Asociación de Academias de la Lengua Española, y coordinador del Diccionario de americanismos, dijo que con esta obra «la unidad de nuestra lengua está felizmente asegurada».Señaló que la realización de esta «titánica empresa», que a las veintidós Academias de la Lengua Española les llevó once años, responde «a la necesidad de tener un corpus latinoamericano que cada vez se hacía sentir con más urgencia».También elogió la labor del Diccionario de la Real Academia Española por haber sido «refugio» de algunas voces y acepciones que en los últimos años se han ido registrando.Según el académico, este diccionario cuenta con una vocación de modernidad y rigor en cuanto a sus mecanismos de investigación.En este sentido, una de las innovaciones es el manejo de los datos en un soporte informático, como el programa ARU, que ayudó a decodificar el vaciado que se hizo a partir de «150 diccionarios de americanismos generales y nacionales, publicados de 1975 hasta 2005».Para López Morales, se trata de una obra descriptiva, actual y, sobre todo, no normativa, lo que la lleva a ser «el diccionario más completo del léxico americano», que comprende desde el hablado en Estados Unidos hasta el de la Argentina.«Esta obra va dirigida a todos los hablantes del español interesados en conocer su idioma y las diferencias existentes entre la lengua que se habla en su país y la de los países hermanos», recalcó.