Los grandes primates podrían tener lo necesario para desarrollar un lenguaje
Una capacidad cognitiva de los grandes primates podría ser la materia prima para desarrollar un lenguaje complejo. ¿Por qué no lo han hecho?
Entre las capacidades cognitivas que tenemos está la de poder distinguir entre el “agente” y el “paciente”. Con esto nos referimos a quien realiza la acción y sobre el que recae, respectivamente. Esto estaba descubierto como algo propio del ser humano. Sin embargo, un nuevo estudio, publicado en PLOS Biology, sostiene que los grandes primates han dado muestras de compartir dicha capacidad, que, además, sería el fundamento para pensar que tienen lo necesario a fin de desarrollar un lenguaje.
Respuestas y más preguntas
Posiblemente te preguntes qué relación hay entre esta capacidad y la posibilidad de dar pie al lenguaje. En tal caso, los científicos consideran que la descomposición de los acontecimientos es fundamental para la sintaxis y la estructura general de un medio de comunicación de este tipo.
Por supuesto que la duda cabe en lo que acabamos de decir, justamente por eso Vanessa Wilson, autora principal del artículo, explicó a Popular Science que su equipo se propuso responder a una pregunta clave sobre la relación entre la descomposición de sucesos y el lenguaje. Dicho esto, querían saber si la segunda de verdad se basa en la primera para funcionar.
La ejecución del experimento consistió en poner a grandes primates a ver videos y, al tiempo, observar cómo se da el movimiento ocular en estos animales. Lo que los científicos vieron es que la atención de los primates iba y venía entre el agente y el paciente, hecho que dio el indicio de que estas criaturas distinguen entre el papel de uno y de otro.
Cuando los autores del estudio notaron que los primats tienen la materia prima para desarrollar lenguajes complejos, como los del ser humano, la pregunta inevitable fue “por qué no lo han hecho”. Esa incógnita queda pendiente, dado que no se sabe el porqué.
Hay, no obstante, una posibilidad que apuntan los científicos. De acuerdo con ellos es muy probable que los grandes primates no tengan la motivación o los recursos para comunicarse sobre las relaciones entre agente y paciente. Pero, reiteramos, ese sigue siendo un misterio.