Real Academia Gallega prepara su
gramática
ABCEl Instituto de Lengua Gallega, organismo dependiente de la Universidad de Santiago de Compostela, elaborará la gramática «institucional» de la Real Academia Gallega (RAG), que estará lista dentro de tres años.El presidente de la RAG, Xosé Luis Méndez Ferrín, y el rector de la Universidad de Santiago, Carlos Casares, han firmado este lunes en La Coruña sendos convenios para, además de la elaboración de la gramática, realizar estudios sobre los apellidos gallegos para la redacción del primer diccionario onomástico de la Comunidad Autónoma.En el acto de la firma de estos convenios también ha estado presente la directora del Instituto de Lengua Gallega, Rosario Álvarez Blanco, que ha valorado este acuerdo de colaboración y ha destacado que el organismo del que es la máxima responsable desde hace seis años tiene acreditada la «excelencia científica».«Con el convenio suscrito hoy el Instituto de la Lengua Gallega redactará la gramática que pretende ser el texto institucional y de referencia de la RAG», ha destacado Álvarez.Por lo que respecta al diccionario onomástico, los trabajos se prolongarán por espacio de dos años bajo la dirección de la profesora, Isabel Boulloso, que ha explicado que no existe una única razón que justifique la castellanización de los apellidos gallegos.Boulloso ha subrayado que no se pueden trazar áreas donde los «Monteiros» se transformaron en «Montero», porque están extendidos por toda la Comunidad Autónoma y la causa pudo depender en última instancia de la voluntad de los funcionarios del registro civil o de los curas encargados de los registros parroquiales.«Los había más partidarios de la castellanización y, en cambio, otros eran más respetuosos con la forma en gallego», ha señalado la profesora, que ha achacado a esta cuestión a que algunos apellidos mantuvieran su forma original y otros sufrieran un proceso de castellanización.Boulloso ha recalcado que el nuevo diccionario pretende recoger las formas «correctas» y «estándares» de los apellidos que «fueron »castellanizados de forma sistemática».«Queremos que la gente sepa que los apellidos forman parte de nuestra historia, de nuestra tradición y son una de las características que nos conforman como pueblo», ha aseverado.Por último, ha señalado que «no se trata de galleguizar los apellidos sino de restituirlos a la forma en la que deberían ser».