Sigüenza, donde los noruegos aprenden
español
GuadaqueHace un año exactamente que la empresa Segontiae recibe en Sigüenza a estudiantes de la lengua castellana provenientes de toda Europa. Sonia Hernández es la responsable de un proyecto que ya había traído a la Ciudad del Doncel a alumnos franceses, suizos y alemanes. El pasado martes llegó desde Noruega hasta Sigüenza el grupo mayor que ha recalado hasta la fecha en la ciudad con el fin de aprender la lengua de Cervantes, que dicho sea de paso, se acordó de Sigüenza en El Quijote: 21 estudiantes del último curso que precede a la universidad en Noruega que llegaban desde la ciudad de Holmestrand, situada al sur del país escandinavo.Para ellos el castellano es su segunda lengua extranjera después del inglés. «Llevaba años con la idea de poner en marcha cursos de Español en mi ciudad. Sé lo que es un curso de idiomas y lo que un alumno espera de él. En este sentido he pensado siempre que Sigüenza es un sitio idóneo para aprender nuestra lengua. Y no sólo porque yo sea seguntina. Objetivamente es una ciudad pequeña en la que todo el mundo habla un perfecto Castellano. El hecho de ser una localidad tranquila permite que los visitantes puedan relacionarse con la gente y hablar el idioma después de las clases», explica Sonia.Este miércoles fueron recibidos en el Salón de Plenos Municipal por el alcalde de la ciudad, Francisco Domingo, y por las concejalas de Turismo y Pedanías, Concha Barahona y Charo Galán Pina respectivamente. Domingo les resumió a los jóvenes noruegos la larga historia seguntina, además de desearles una feliz estancia y aprendizaje en Sigüenza. El Ayuntamiento obsequió a las responsables del grupo con un libro de la ciudad y de su gastronomía, y tuvo un detalle con cada uno de los alumnos venidos de Escandinavia. Finalmente, por cortesía de la Concejalía de Turismo Municipal, los estudiantes realizaron una visita guiada por la ciudad. Sonia agradeció el apoyo del Ayuntamiento desde la gestación inicial a su proyecto «que puede ayudar desde el punto de vista turístico y que da a conocer fuera de nuestras fronteras a la ciudad», dijo. Por su parte el Aacalde destacó que Segontiae contribuye a revitalizar el ambiente estudiantil y universitario de la ciudad y que abre las puertas de la ciudad a un campo nuevo y muy atractivo como es la «enseñanza de idiomas».Una nueva versión, en esta ocasión lingüística de SigüenzaEl hecho de la breve distancia a Madrid y a sus museos, y aún menor al aeropuerto de Barajas, las posibilidades culturales de la ciudad, de combinar naturaleza e historia y el atractivo que ya despierta fuera de nuestras fronteras Castilla-La Mancha hicieron decantarse a esta última expedición noruega por la ciudad de Sigüenza para aprender castellano en Sigüenza. Fructifica así el trabajo previo hecho por Hernández acudiendo a ferias internacionales de escuelas de idiomas. «He difundido el proyecto en Suiza, Francia, Londres y en los países escandinavos. Explico mi programa personalizado y lo que es mi ciudad. Cuando la gente lo conoce realmente, Sigüenza les parece un destino muy atractivo», afirma. Los cursos de castellano de Segontiae se adaptan a los requisitos temporales y de nivel de los alumnos. «Vienen alumnos desde una semana hasta tres meses», dice Sonia. Las clases son intensivas, de cuatro horas por las mañanas. Por las tardes el programa se complementa con la organización de excursiones para que conozcan la cultura española, castellano manchega y seguntina, y la historia, monumentos arquitectónicos y patrimonio natural de la localidad. «Los alumnos vuelven a sus países muy contentos. Los que vienen en verano, repiten», termina la profesora.