Usan juegos de palabras para diagnosticar
Alzheimer
Europa Press Investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) aseguran que algunos aspectos de la semántica del lenguaje podría ayudar a identificar el deterioro categorial que padecen las personas afectadas por el Alzheimer u otras demencias. Para comprobar esta relación, un equipo liderado por la catedrática de Psicología Básica Herminia Peraita ha analizado las categorías y rasgos semánticos de un total de 212 personas de entre 55 y 93 años, 107 sin problemas de salud y 105 afectados por el Alzheimer. La investigación ha sido financiada y publicada por la Fundación BBVA. Una de las primeras funciones que se ve afectada en las personas que desarrollan Alzheimer es el sistema léxico, presentando una dificultad en el acceso a determinadas palabras de nuestro "diccionario mental", a veces muy comunes, e incluso cuando la persona, en una fase leve de la enfermedad habla y se expresa con bastante fluidez, la dificultad para encontrar determinadas palabras hace que su lenguaje resulte muy entrecortado. Además, la media de palabras producidas por unidad de tiempo (un minuto, por ejemplo) está muy por debajo de la media para esa edad, según reconocen los autores. Por ello, la hipótesis de partida de este trabajo es que en los enfermos de Alzheimer, las definiciones de categorías, tanto las referidas a seres vivos (animales, plantas, etc.) como a seres no vivos (herramientas, vehículos, ropa, etc.), se van deteriorando de un modo evidente en etapas tempranas de la enfermedad, al irse deteriorando también los conceptos que subyacen a estas categorías. Del mismo modo, se ha observado también que el deterioro se produce con una cierta gradualidad. Los conceptos, o su expresión lingüística, no de pierden "de golpe", según indica la doctora Peraita, sino que la estructura de atributos que le sirve de soporte, se va perdiendo. Según una hipótesis adicional, estos dos tipos de categorías semánticas no se deterioran con el mismo ritmo y de la misma manera, sino que se pierden antes las categorías de seres vivos, una idea no referida sólo a enfermos de Alzheimer, sino también a otros tipos de patologías neurodegenerativas. El listado de definiciones se recogió en el marco de una investigación dirigida por la doctora Peraita en los últimos años de la década de los 90, para lo que previamente se contactó con los servicios de Neurología de ocho hospitales de la Comunidad de Madrid y con centros de mayores para la obtención de la muestra de control.