Blecua, director para una RAE que
será digital
Javier Rodríguez Marcos, El PaísNo habían dado aún las ocho de la tarde del jueves cuando la puerta del despacho del director de la Real Academia Española se abrió solemnemente para dar paso a su nuevo ocupante, José Manuel Blecua, zaragozano de 1939 y «catalán por oposición», como se describió a sí mismo resumiendo sus años como catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona, de la que llegó a ser vicerrector. A su lado estaba Víctor García de la Concha, que ha estado en cabeza de la institución durante los últimos doce años.Fue él el encargado de anunciar el resultado de una votación aplazada desde el jueves pasado. Entonces, ninguno de los tres candidatos —José Antonio Pascual, Darío Villanueva y el propio Blecua— obtuvo la mayoría absoluta necesaria. Ayer, sin embargo, el nuevo director obtuvo esa mayoría en una sesión que apenas duró media hora y que se resolvió finalmente entre Blecua y Villanueva por dieciocho votos a catorce a favor del primero. Esta vez, ninguno de los 32 académicos con derecho a sufragio —aquellos con más de doce asistencias en el año al pleno de los jueves— votó en blanco y solo dos lo hicieron por correo: el escritor y economista José Luis Sampedro y el premio Nobel Mario Vargas Llosa, de viaje entre Perú y Chile después de su semana de gloria en Estocolmo.«Lo hemos votado todos», dijo Víctor García de la Concha cuando le preguntaron por los números de la votación. «Esa es la tradición de esta casa». La tradición pública, al menos. En el secreto de la sala de plenos habían quedado las tensiones transversales entre filólogos y creadores, estudiosos de la lengua y de la literatura.José Manuel Blecua Perdices, hijo de un histórico de la filología española, el maestro de maestros José Manuel Blecua Teijeiro, recordó ayer a algunos de los que le precedieron en el cargo, de su maestro Rafael Lapesa a Lázaro Carreter pasando por Manuel Alvar. Él será el 29º director de una institución que se prepara para celebrar su tercer centenario en 2013. «Lo celebraremos digna pero austeramente, por la crisis», dijo, una crisis que ha reducido en dos tercios la asignación estatal al proyecto del Diccionario histórico, coordinado por José Antonio Pascual, compañero de Blecua en el mítico programa de televisión Hablando claro.«El Diccionario histórico vivirá en Internet, no en el papel», contó también el nuevo máximo responsable de la llamada docta casa. De hecho, ha nacido ya como una obra directamente digital. Su destino una vez culminado será lo que a García de la Concha le gusta llamar «la ventana única del español», un gran portal dedicado a la lengua que echará a andar en los primeros meses del próximo año.También el año próximo está previsto que se presente el tercer y último tomo de la flamante Nueva gramática, el correspondiente a fonética y fonología, cuya coordinación ha corrido a cargo del propio Blecua y que contará con un importante material audiovisual de apoyo. El propio Blecua publicó en 1979 una gramática escrita a cuatro manos con Juan Alcina Franch.Junto a la Red, América es la otra gran estación del nuevo viaje de José Manuel Blecua al frente de una institución en la que ingresó en 2003 (sillón h) con un discurso sobre el Diccionario de autoridades y en la que ya ejerció como secretario entre 2007 y 2009. Antes, en 2005, había presidido la Comisión Estatal del IV Centenario del Quijote. «Soy un enamorado de América», dijo Blecua al recordar sus años en el Colegio de México y en la Universidad de Ohio. A su lado, García de la Concha, el gran impulsor de la política panhispánica de la RAE, escuchaba con satisfacción. Además de como director de la Española y por serlo, Blecua ejercerá también como presidente de la asociación que reúne a las veintidós academias de América y Filipinas.Representantes de todas esas academias asistieron ayer a la presentación de la nueva edición de la Ortografía, una obra «útil para todos los hispanohablantes pero utilísima para los estadounidenses que estudian masivamente español», como dijo el director de la Academia Norteamericana, Gerardo Piña. Blecua recordó ayer tras su elección el creciente peso de Estados Unidos dentro de la geografía del español. «Pronto serán 65 millones de hablantes según algunas prospecciones», dijo.La nueva edición del diccionario académico, el DRAE, que coincidirá con el tercer centenario de la institución, la «actualización constante» de «piezas fundamentales» como el archivo y la biblioteca y el impulso de lo que la Academia tiene de «servicio público» fueron algunas de las líneas que Blecua improvisó como programa de gobierno en una labor en la que deberá contar con Darío Villanueva, su rival ayer, como secretario y el citado José Antonio Pascual como vicedirector. «El director de esta casa no tiene equipo. Tendrá que aguantarme al menos dos años más», dijo entre bromas Pascual, «satisfecho» por la elección de un historiador de la lengua: «Cada vez quedamos menos».El 13 de enero Blecua, que fue director académico del Instituto Cervantes, recibirá el testigo de manos de García de la Concha, un hombre que ha marcado los últimos tiempos de una corporación que en 12 años parece haber avanzado más de un siglo. «Prometo ser transparente, un académico ejemplar», ha dicho alguna vez el ya director en funciones. A José Manuel Blecua le toca continuar su labor al frente de la torre de control de la lengua española sabiendo que ya es tanto o más la lengua de Medellín (Colombia) como la de Medellín (Badajoz).