clandestino
Llamamos clandestino a aquello que es secreto o que se desea mantener oculto, en especial por temor a la ley o a las autoridades o, incluso, al descrédito causado por el rechazo de la sociedad ante determinados comportamientos. El diccionario de la Academia española le adjudica el significado de ‘secreto, oculto, y especialmente hecho o dicho secretamente por temor a la la ley o para eludirla’.
Su sentido se ha mantenido intacto desde el latín clandestinus, derivada de clam ‘furtivamente, a escondidas’, que se formó a partir de la raíz prehistórica indoeuropea kel- ‘ocultar’.
Era voz de uso corriente en los siglos XV y XVI, referida, en general, a amores adúlteros o a casamientos de cristianos con moras o judías, como nos muestra este texto de Antonio de Guevara, extraído de su Libro primero de las epístolas familiares (1513):
El casamiento que se hace clandestino y abscondido, digo que procede de gran liviandad, y sale de mucha crueldad, porque da a todos los vecinos que decir, y a los viejos de que hablar (Corde).
La raíz kel- también está en la base de yelmo, procedente del germánico hĕlm, que produjo asimismo el inglés actual helmet. Con el prefijo griego ευ- dio lugar a eucalipto ‘árbol cuya semilla está escondida’