marihuana / mariguana
El nombre marihuana hace referencia al producto psicoactivo obtenido de la planta Cannabis sativa, usado con fines recreativos, religiosos y medicinales. A pesar de que todavía es ilegal en la mayor parte del mundo, su consumo y la regulación de su comercio ya rigen legalmente en varios países y estados norteamericanos.
Su principal principio activo es el tetrahidrocannabinol (THC), usado desde hace cinco milenios, como droga psicoactiva. Sin embargo, hay variedades que contienen cantidades pequeñas de THC y presentan un mayor contenido de canabidiol (CBD), usado en medicina para combatir la epilepsia refractaria y atenuar los dolores de algunas artrosis.
El nombre marihuana parece haberse originado en México, tal vez a partir de Mari Juana hacia fines del siglo XIX, aunque es posible que la h haya sido introducida por los consumidores estadounidenses para representar mejor su pronunciación en inglés.
El médico, traductor y lexicógrafo salmantino Fernando A. Navarro conjetura en su libro Parentescos insólitos del lenguaje:
Si 'juan' es en México cualquier soldado raso, y 'juana' o 'marijuana', la prostituta cuartelera y la soldadera o mujer que acompañaba a los soldados en campaña, nada más lógico que llamar marijuana a una droga, como el hachís, especialmente difundida en ámbitos castrenses y cuarteleros. Los etimólogos más serios suelen negar validez a esta etimología popular, pero lo cierto es que marijuana es en la actualidad el nombre más frecuente de esta droga en los Estados Unidos, y que tanto en inglés como en francés se han acuñado ya las formas coloquiales Mary Jane y marie-jeanne, respectivamente. (Madrid: Del Prado 2002, pág.123).
Sin embargo, según una hipótesis presentada por el etimólogo británico Eric Partridge, el nombre podría haber sido tomado del de una de las Bahamas: la isla de Mariguana, donde, dígase de paso, el consumo de esta droga es ilegal.
En 1927, el sustantivo marihuana aparece registrado por la pluma de don Ramón Valle-Inclán en Tirano Banderas:
El tiempo parece haber prolongado todas las acciones, suspensas absurdamente en el ápice de un instante, estupefactas, cristalizadas, nítidas, inverosímiles como sucede bajo la influencia de la marihuana.