obtuso
Los latinos empleaban el verbo obtundere para expresar la acción de ‘achatar golpeando’, formada por el prefijo ob- ‘enfrentado’, ‘opuesto’ y el verbo tundere, golpear. Mediante la acción descrita, lo que era agudo se volvía romo, chato, sin punta.
En geometría, se llama ángulo obtuso a aquel que es más abierto que uno recto, o sea, lo opuesto de un ángulo agudo, o en otras palabras, que mide más de 90 grados.
En sentido figurado, obtuso también se aplica a la persona torpe, que está lejos de contar con agudeza mental, que es tarda en entender. El verbo latino tundere sobrevive en muchas palabras de nuestra lengua, tales como contundir, contundente, contusión y tunda.