¿Qué es la antropología lingüística?
(Soner Eker, Unsplash)
La antropología lingüística es una disciplina relativamente reciente. Su evolución, sin embargo, ha sido vertiginosa, desde la preocupación por la gramática o las formas lingüísticas en su primera etapa, hasta la lingüística antropológica contemporánea que contempla la relación de la lengua con procesos y estructuras sociales complejas, como los conflictos raciales, la legitimación del poder, la globalización, etc. donde la lengua deja de ser el objeto de estudio para ser un mecanismo a través del cual entender los procesos sociales.
La lengua es la principal característica cultural que distingue al ser humano de los demás animales. La antropología lingüística es una rama de la antropología que se especializa en el estudio de las diversas lenguas habladas por el hombre y su papel en la vida social de las comunidades. Existen otros términos relacionados, como por ejemplo la sociolingüística o lingüística social, sin embargo, los significados pueden ser ligeramente diferentes.
¿Qué estudia la antropología lingüística?
El objetivo de la antropología lingüística es estudiar la manera en que el lenguaje modela y da forma a la comunicación, constituyendo una parte fundamental de la identidad social y cultural de una comunidad. La corriente contemporánea estudia a través de ella los complejos procesos sociales en los que se encuentra inmerso un grupo social o comunidad.
¿A qué se dedica la antropología? ¿Qué significa antropología? La antropología general se dedica al estudio e investigación de las interacciones sociales de la humanidad y sus formas de organización en grupos sociales, constituidos a través de la historia, en el pasado y en el presente.
Esta disciplina se divide en cuatro vertientes principales: la antropología arqueológica, antropología biológica, antropología social y antropología lingüística. Esta última, la carrera de lingüística, se rige para su estudio y desarrollo, por métodos de dos disciplinas: la antropología y la lingüística. En ella se percibe al individuo como una parte integrante del grupo social, en un tiempo y espacio definidos, con características culturales propias: valores morales, creencias, tradiciones, etc.
Importancia de la antropología lingüística
¿Por qué es importante la antropología lingüística? La diferencia de los antropólogos lingüistas de otros estudiosos de la lengua, es la relación que se establece entre el lenguaje y el grupo social, y su visión innovadora sobre la influencia en asuntos como las relaciones de poder, la base cultural del conflicto étnico y del racismo, la expresión artística, los cambios sociales…
Uno de los aspectos más importantes es que el antropólogo lingüista trata de ir más allá de lo consciente y quiere descubrir estructuras mentales inconscientes que definen el entorno a través del lenguaje.
Evolución de la antropología lingüística
¿En qué consiste la lingüística? Muchas lenguas han desaparecido en el transcurso de la historia humana y con ellas una visión del mundo. El estudio de las diversas lenguas habladas por diferentes grupos sociales en el transcurso de la historia es relativamente reciente.
El estudio de las lenguas no es una materia unificada, su evolución abarca diversas prácticas analíticas y teóricas, en ocasiones no compatibles, de los fenómenos lingüísticos. Alessandro Duranti, catedrático de Antropología de la Universidad de California, dividió el desarrollo de esta disciplina en tres estadios o paradigmas principales.
Primer paradigma de la antropología lingüística
Surge con el nombre de lingüística a finales del siglo XIX. Franz Boas, alemán que fue el padre de la antropología norteamericana, sentó los cimientos de la antropología cultural. De su influencia nace el primer paradigma, donde el estudio lingüístico era tan importante como los registros biológicos, arqueológicos y culturales.
La primera Oficina de Etnología Estadounidense y su director John Wesley Powell financiaron el estudio de Franz Boas sobre las lenguas indígenas de Norteamérica. La finalidad y objetivo de la institución era clasificar las tribus y conocer las relaciones que se establecían entre sus integrantes.
Boas documentó las tradiciones culturales y las lenguas indígenas, muchas de las cuales desaparecían producto de la colonización europea. Antes de su investigación solo existía una recopilación de mitos y leyendas y unas listas de vocabulario. Sus trabajos fueron la base de la antropología cultural. Se estableció la relación entre la lengua y la cultura lingüística, y entre la raza y la lengua.
Edward Sapir, discípulo de Boas, también realizó importantes aportes a la lingüística tipológica y a la teoría fonológica. La relatividad lingüística, conocida como «hipótesis de Sapir-Whorf», generó prolongados debates por muchos años.
Segundo paradigma de la antropología lingüística
El segundo paradigma es llamado frecuentemente sociolingüística y antropología lingüística. La apertura del departamento de lingüística en las universidades norteamericanas fue determinante en esta segunda etapa.
La colaboración de Dell Hymes, proveniente de Harvard en 1960, enlazó el interés por el habla como actividad cultural, con el interés de Gumperz en las variaciones lingüísticas y dialectos sociales.
Así se fueron estableciendo las bases de un nuevo paradigma. La “etnografía del habla” (Hymes – 1962) se extendió y se publicó en dos colecciones tituladas The Ethnography of Communication (La Etnografía de la Comunicación) de Gumperz y Hymes en 1964.
Tercer paradigma de la antropología lingüística
Finalizando los años 80 se produce una revolución que va más allá del concepto establecido en el segundo paradigma sobre la lengua y su rol en los conflictos y encuentros sociales. El término «performatividad» de Butler (1990) fue adoptado por gran cantidad de teóricos para destacar la vinculación de la palabra con la construcción cultural. La relación entre el espacio y la lengua se convirtió en un centro de especial atención.
Si bien el primer paradigma se caracterizó por conceptualizar la lengua como gramática, con la lingüística como punto de referencia y la fascinación hacia las formas lingüísticas, el segundo paradigma se enfocó en la variación y el habla como ordenadores de la cultura y de la sociedad.
Posteriormente, el tercero parece lidiar con inquietudes teóricas, con el interés de capturar la conexión entre los procesos y estructuras sociales, también abandona el convencimiento de que la lengua es el único y principal foco.
Los investigadores contemporáneos se plantean cuestiones acerca de la relación de la lengua con los fenómenos sociales: la formación de identidad, legitimación del poder, globalización, nacionalismo, conflictos étnicos, etc. tomando la lengua ya no como un objeto de estudio, sino como forma de acceder a estos complejos procesos sociales.
¿Cuál es el objeto de estudio de la antropología lingüística?
¿Qué estudia la lingüística? Los paradigmas no mueren, permanecen en el tiempo y coexisten, continúan vigentes y se siguen realizando publicaciones de las diferentes corrientes. La tendencia contemporánea centra su atención y estudia aspectos especialmente significativos para este nuevo enfoque.