percance
Inconveniente imprevisto, contratiempo que ocasiona algún perjuicio, en general no demasiado grave. El diccionario académico registra la locución percances del oficio, equivalente gajes del oficio, pero los propios corpus de la “Docta Casa” no registran ninguna ocurrencia desde hace, por lo menos, 75 años.
La palabra proviene cazar, que se formó a partir del latín vulgar captiare, derivado de capĕre ‘tomar, coger, agarrar’. En el siglo XIII, se usaba el verbo porcalçar con el significado de ‘trabajar esforzadamente, afanarse’, como vemos en este fragmento de Vida de S. Domingo, de Berceo:
Los dias e las noches lazrava el barón
días en porcalçando, noches en oración...
Otros autores usaban percançar y percanciar, con el mismo significado. En catalán se decía percaçar ‘averiguar’, ‘comprender’. En cierta época apareció la locución que menciona el diccionario de la Academia: percances del oficio, de donde surgió el significado actual de ‘inconveniente’ o ‘contratiempo’.
En el portugués actual, se dice percalço, y tiene dos significados: 1) ganancia que se obtiene por alguna actividad y 2) trastorno, inconveniente causado por la actividad que la persona lleva a cabo (“gajes del oficio”).