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Proponen nueva hipótesis sobre el origen del lenguaje

El profesor Shigeru Miyagawa, del Instituto Tecnológico de Massachussetts

 

Peter Dizikes, MIT News Office

En algún momento de la historia humana, probablemente hace unos 50.000 o 100.000 años, los homínidos empezaron a comunicarse entre sí de una manera excepcionalmente compleja. Es fácil imaginar el cambio sufrido por los cavernícolas gruñones, cazadores recolectores, cuando empezaron a balbucear y a señalar cosas. En un artículo publicado ahora en marzo, un lingüista del Instituto Tecnológico de Massachussetts (MIT) sostiene que el lenguaje se desarrolló rápidamente para convertirse en un sistema de alta sofisticación. En lugar de balbucear y señalar, el ser humano desarrolló súbitamente la sintaxis y estructuras lingüísticas muy semejantes a las de hoy.

"La complejidad jerárquica del lenguaje de hoy parece haber estado presente en esa facultad humana desde su surgimiento", asegura Shigeru Miyagawa, profesor de Lingüística del MIT y coautor de este trabajo. La afirmación no ha concitado la unanimidad de los académicos: muchos de ellos siguen creyendo que los seres humanos empezaron usando una especie de protolenguaje, una clase rudimentaria de comunicación que gradualmente evolucionó hacia la aparición de las palabras y de formas sintácticas. Sin embargo, Miyagawa cree que no ha sido así; según él, las palabras contienen rasgos sintácticos que muestran que deben haber evolucionado de un sistema más antiguo, cargado de sintaxis, más que de proferencias primarias.

"Desde el momento en que podemos encontrar sintaxis dentro de las palabras, no hay motivo para considerarlas 'fósiles lingüísticos' de un sistema previo, presintáctivo", dijo.

Miyagawa propone una nueva hipótesis sobre la creación del lenguaje: los seres humanos combinaron una capa "expresiva" del lenguaje, como la que vemos en los pájaros cantores, con una capa "léxica", como la de los monos que profieren sonidos aislados con significados precisos, tales como las llamadas de alarma, que en algunos casos pueden ser específicas para diferentes tipos de amenazas. Según la "hipótesis de integración" de Miyagawa, por alguna causa esas capas se fusionaron en algún momento en forma rápida y exitosa.

 

En la ruta de Chomsky

El trabajo de Miyagawa, en coautoría con Vítor A. Nóbrega de la Universidad de São Paulo (USP),  se publicó en marzo en el periódico arbitrado Frontiers in Psychology. Los autores de este trabajo afirman que una simple palabra puede ser "internamente compleja, a menudo tan completa como toda una oración", lo que haría menos probable que las palabras que usamos hoy provengan de un discurso primitivo, presintáctico. 

Tomemos por ejemplo el sustantivo nacionalización. Empieza con nación, que es un sustantivo; se le añade el sufijo -al para formar el adjetivo nacional, y luego el sufijo -izar, con lo que se convierte en verbo. Luego se combina con el sufijo -ción, que da lugar a un nuevo sustantivo, con significado diferente del original. "La estructura jerárquica está presente no solo en palabras simples sino también en compuestos, que, a diferencia de lo que algunos afirman, no constituyen formas fosilizadas de un lenguaje anterior".

La hipótesis de integración de Miyagawa se vincula intelectualmente al trabajo de otros académicos del MIT, como Noam Chomsky, quien afirma que los lenguajes humanos están conectados universalmente y provienen de nuestra capacidad de usar la sintaxis. Esta escuela de pensamiento sostiene que las lenguas humanas han unido diversas láminas expresivas y léxicas en un sistema que Chomsky llamó fusión.

"Una vez que ambas láminas se han fusionado, tenemos esencialmente todos los rasgos de un lenguaje humano hecho y derecho", sostiene Miyagawa.

Los académicos piensan que la hipótesis de la integración de capas puede generar un productivo conjunto de indagaciones sobre integración. Andrea Moro, profesor de lingüística del Instituto de Estudios Avanzados de Pavía, Italia, que editó el artículo, opinó que se trata de una crítica "muy interesante" a la idea de que el lenguaje humano se desarrolló gradualmente.